Es una locura pretender esconderse permanentemente de cualquier virus y sanitizar a todo el planeta, decía un experto en salud, mientras permitimos que nuestras mascotas nos laman la cara, manipulemos un celular con mas bacterias que las que tiene un retrete y durmamos en una cama donde viven millones de ácaros y otras bacterias. Nos lavamos con frecuencia las manos usando ademas de agua y jabón, cloro, gel con alcohol, desinfectantes de las mejores marcas aterrados de contagiarnos, mientras disfrutamos de la practica del sexo oral. La incongruencia total en nuestros hábitos de limpieza.
Al parecer el virus ya gano la batalla,porque se queda aquí y no se va, nos hizo replegarnos y quedarnos en nuestras casas en una intentona de evitarlo, nos arrebato los sueños y nos robo la tranquilidad. Nos mostró lo vulnerable que es nuestra vida en todos los aspectos, quebró negocios, acabo con empleos, genero rupturas y violencia, logro dividirnos en lugar de unirnos.
Hoy solo nos queda doblegarnos ante lo inevitable, convivir con el virus nuevo al cual no terminamos de conocer, es letal dicen los científicos, pero menos que otras gripes. Solo están en riesgos los ancianos y enfermos, pero guarden a sus jóvenes y a sus niños. No hay vacuna, aunque si grandes intentos, solo hay que esperar para ver que país la logra primero.
Muchos se contagiaron y muchos ya sanaron, otros se contagiaron pero ni se enteraron, porque así es el virus, asintomático en la mayoría de los casos. Son cientos los hospitalizados y probablemente la mayoría se recupere, y lamentablemente algunos mas perezcan.
Cuanta información ha circulado por los medios y las redes sociales, tanto de los expertos como de los que se creen serlo; de los temerosos y de los incrédulos. A estas alturas de la pandemia de COVID-19 la mayoría ya no cree en nada, queda en sus mentes la sospecha de la conspiración global, de la guerra económica entre los grandes, del control de la población mundial y el nuevo orden mundial.
La realidad es que ya no aguantamos, queremos seguir viviendo, reabrir los negocios, activar los empleos, despertar la economía. Y todo eso comienza ya el 1ero. de junio del 2020. Con todas las reservas y miedos se saldrá de nuevo a la calle, ataviados con cubre bocas que al final nunca decidieron si era bueno o no usarlos, con botellas de gel antibacterial en cada puerta, con medidas «estrictas» de salubridad para todos, ante el temor de un rebrote de contagios.
Lo irónico de esta «Nueva Realidad» que comienza se puede resumir en una sola palabra «LIMPIEZA» porque el virus se destruye al igual que otros, usando solo agua y jabón. Hizo falta que un virus golpeara al planeta para recordarnos lo importante que es ser limpios. Y así después de las alargadas cuarentenas también se limpiaron nuestro cielo y el mar, las especies animales lo agradecieron y se dejaron mostrar. No es el virus quien acabara con el planeta, de eso nos estamos encargando nosotros.
ABOGADOS DE CABO S.C. 